Entré a la nueva clase. Estaba vacía, claro. Me acerqué a mi mesa y saqué unos papeles y un bolígrafo de uno de los cajones, anteriormente preparados por la dirección del colegio para su uso. Garabateé algo en la hoja y la pegué en la pizarra. Me fui.
"Buenos días. Soy Ilan, vuestro nuevo profesor de Mitología. Os tengo que pedir perdón por mi ausencia ayer, pero me surgió un contratiempo y no pude acudir a dar clase. Como... indemnización... os he puesto pocos deberes esta semana. Eso sí, hacedlos si no queréis un suspenso en Mitología.
El siguiente miércoles podremos estar más tranquilos y conocernos mejor... espero llevarme bien con todos vosotros y que seáis unos chicos buenos, ya que no tengo mucha paciencia. Si os comportáis, os aseguro que os divertiréis conmigo. De lo contrario... mejor comportaos y no tendré que hablaros de lo contrario.
Nos vemos Invitado."