La playa

Habia caminado demasiado, aunque, en realidad no lo habia sentido asi, desde que Tora me habia dicho esa mañana acerca de la "vigilancia" extrema de los Kher sobre mi, me sentia observada, y bastante incomoda, -Tendre que largarme a una mision kamikaze para que me dejen en paz- gruñi y suspire, mire la blanca arena, la cristalina y transparente agua salada frente a mi y sonrei, algo en su murmullo musical me recordaba la risa de Edward, -Me has vuelto una romantica sin remedio- murmure al viento, sonriendo

Estuve todo el rato a sus espaldas, al parecer ella no se dio cuenta de mi presencia.
-¿Quién te volvió tan romántica? ¿Edward? -sonreí de oreja a oreja.

Di un brinco
-Lydia!- murmure, ahogando un grito, -¿Cuanto tiempo llevas ahi?- susurre, mientras trataba de tranquilizar mi pulso, tome aire y clave la mirada en el suelo, -eh... si- susurre en voz muy baja, -Edward me ha vuelto una romantica sin remedio-

Junté mis manos tras mi espalda y sonreí.
-Te seguí todo el rato. Me sorprende que no te dieras cuenta.

Suspire
-Tu hermano me pone tonta- me encogi de hombros, -Es... algo nuevo para ambos- susurre

Me reí entre dientes.
-Lo sé.

Suspire
-Se supone que yo era la coqueta sin remedio de la familia- rode los ojos, -Y ahora.. me siento como una niña- hice un pucherito

Me quité las botas y las cogí con mi mano izquierda. Me quedé completamente descalza pisando la caliente arena. Me puse frente a ella y sonreí mostrando mi perfecta y blanca dentadura y dejando mostrar mis colmillos.
-Eso es porque estás enamorada.
Le di la espalda y comencé a caminar por la orilla, mojando mis pies y el dobladillo de mis pantalones baqueros. Mi pelo bailaba en el viento y el agua era la más limpia que había visto jamás. Miré al cielo, una nube se comenzaba a apartar del sol, mi piel comenzó a petrificarse mientras yo seguía caminando. Hice un gesto a Zyann para que me acompañara.

Segui a Lydia, sopesando sus palabras
-¿Segura que estoy enamorada?- susurre, -Bueno.. puede ser- me encogi de hombros, -Pero Edward...- suspire, -No creo que sienta lo mismo- sonrei debilmente

Sonreí con la ceja izquierda arqueada.
-¿Y por qué no?

-Por que...- suspire, recordando la conversacion de la noche anterior, -Por que cree que puede dañarme-

Alcé las cejas.
-Siempre dice eso.
Suspiré.

Rode los ojos y sonrei levemente
-Realmente me agrada tu hermano- susurre, -pero me preocupa que salga corriendo por tantas cosas que me rodean-

Sonreí y miré mis pies mojados en el agua, una vez más, una nube blanca tapó el sol y volvieron a su estado normal.
-Lo sé. Noto tus mariposas en mi estómago.

Sonrie debilmente
-Debiste sentirlas ayer en la noche- murmure, -estaban desbocadas- bromee

Me reí.
-De eso nada, ya tengo suficiente con mis sentimientos como para cargar de los de una loca demonio enamorada.

Escuché la voz de Cath y me sobresalté. Su voz era un pequeño susurro... Procedía del colegio, me impresionó que pudiera escucharla a tanta distancia.
-Cath...

-Cath- murmure, mirando hacia el castillo, que estaba a la distancia, sali como una flecha, me sentia ligera, -Lydia!- le grite, para que me siguiera

Comencé a correr con las botas en mis manos hacia el castillo. Alcancé a Zyann enseguida, mi velocidad era impresionante, la monté a mis espaldas y fuimos al castillo.

Desde la playa, jugue con la mente de Zyann... Era tan placentero hacerlo, sembrarle miedos y dudas... Pobre demonio ingenua... rei al viento, tan solo comenzaba con ella... Despeus de esto, no le quedarian ganas de existir mas...

Escuche los pensamientos de Zyaan y sonrei... comenzaba a ganar terreno con ella

Escuche el llamado de Zyann, desapareci de ahi

Llegue a la playa rapidamente, me gustaban esas fugas nocturnas, aspire el aroma del agua salada, que me llego mezclado con el aroma de Casandra..
-Tonterias- susurre sonriendo, quitandome los jeans y la sudadera y tirandome al agua, Espero que no tengas cobertura amplia Tora rei